El procedimiento, que tuvo lugar el 28 de mayo, se realizó conforme a las normas de Responsabilidad Social y Buenas Prácticas establecidas en el Código de Procedimientos Mineros de la Provincia.
En esta instancia, el DPA tomó muestras testigos de agua con el objetivo de caracterizar la línea de base ambiental del proyecto y asegurar la calidad, trazabilidad e independencia de los resultados analíticos. Esta línea de base es esencial para evaluar el comportamiento ambiental del emprendimiento a lo largo del tiempo, en especial antes del inicio de la etapa de perforación prevista para los primeros días de junio.
La consultora especializada Hidroar S.A. tomó muestras de agua subterránea en tres puntos estratégicos: aguas arriba, dentro del área del proyecto y aguas abajo. Paralelamente, el DPA realizó contramuestras para su análisis independiente en laboratorios certificados, garantizando así un doble control sobre los resultados.
La jornada fue coordinada por la Secretaría de Minería de Río Negro y contó con la participación de la Secretaría de Ambiente y Cambio Climático, el Departamento Provincial de Aguas, la Defensoría del Pueblo, la Municipalidad de Valcheta, superficiarios del área, vecinos y vecinas, además de estudiantes y docentes de una escuela local.
Establecer la calidad del agua al inicio del desarrollo de un proyecto minero es fundamental para proteger las condiciones naturales de los recursos hídricos. Permite detectar cualquier alteración futura, asegurando que la actividad se desarrolle sin comprometer el equilibrio ambiental de la zona.
El Depósito Ivana forma parte del distrito minero Amarillo Grande y está considerado el yacimiento de uranio-vanadio más importante del país, con una estimación de 28 millones de toneladas de mineral.